
Unánimes juntos
“Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos” Hechos 2:1 RVR1960 Los superhéroes de historietas de...

Una madre que cree
Una madre por sus hijos es capaz de cualquier cosa. Este sentimiento la lleva a realizar tareas titánicas, y a defender a sus vástagos a ultranza. Pero una madre que cree en Dios es sencillamente indetenible. La pasión de ellas intercediendo por los hijos, el clamor constante porque el Creador proteja a su descendencia, que los guíe, que los lleve por el camino correcto las convierte no solo en progenitoras amorosas, sino en guerreras espirituales que no conocen el cansancio o el desánimo. ¡Dios bendiga a todas las madres, especialmente a las madres cristianas!