No me avergüenzo del Evangelio

    “Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.”

    Romanos 1:16 RVR1960

    Predicar el Evangelio en todas las naciones, y que las personas tengan acceso y escuchen del Hijo de Dios, forma parte de la misión de los cristianos desde que fue dada la gran comisión (Mateo 28:19-20 RVR1960). Y aunque este Evangelio posibilita que nos reconciliemos con Dios, que tengamos perdón de pecados bajo un nuevo pacto, y proporciona el acceso a salvación y vida eterna, nos apena predicarlo a otros. En medio de tantas filosofías, teorías científicas, corrientes de pensamiento e ideas modernas, nos avergüenza hablar de Cristo y que seamos tildados de retrógrados, de mentalidad atrasada, de fundamentalista, entre otros aspectos.

    Y así se ve Pablo, que iba camino a Roma, ciudad más importante del mundo en la época, cuna de grandes pensadores, filósofos, y de un basamento religioso totalmente discordante con el mensaje que llevaba el apóstol. Y dice al respecto: Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego. Requería valentía y coraje hacerlo, pues la muerte podría aguardar en cualquier esquina, y la vida de las personas valía muy poco en aquel entonces, más cuando su prédica era de tropiezo para los judíos, pero para los gentiles locura (1 Corintios 1:23 RVR1960). Sin embargo, abandona toda vergüenza y temor, conociendo que lo que porta es luz para un mundo en tinieblas, lleva un mensaje de salvación para todo el que creyese, fuese judío o gentil, el primero por ser pueblo escogido, el segundo como pueblo adquirido.

    No permitamos que nuestro temor a ser avergonzados ocasione que las personas vayan a una eternidad de condenación. Nuestra inactividad está haciendo que conocidos, amigos, y familiares no tengan acceso a la salvación. No nos avergoncemos de Cristo y Su sacrificio, que sin importar el tiempo en el que vivamos, es tan actual y valedero como lo fue antes. ¡El Señor te bendiga!

    #NoMeAverguenzoDelEvangelio, #PoderDeDios, #SalvacionParaElQueCree, #MinutosConDios, #ReflexionesDiarias

    Leave a Reply

    Your email address will not be published. Required fields are marked *